Los gobiernos de Perú, de Ecuador, de Chile y de Colombia tienen que hacer frente a las consecuencias del cambio de la 'La Niña' al 'Niño' en las costas del Pacífico oriental. Ese cambio consiste en que las aguas del océano se calientan en el periodo navideño. Ese fenómeno climático genera abundantes lluvias, inundaciones y deslizamientos de tierra. En los últimos años se observa también un endurecimiento del fenómeno del Niño y los científicos debaten si esa tendencia se debe al cambio climático o no.

En cualquier caso los gobiernos de los países afectados como Perú, Ecuador, Chile y Colombia están reservando partidas de dinero y preparando planes de contingencia para las consecuencias del Niño. Habrá que afrontar los daños materiales y humanos de las lluvias torrenciales en sus respectivos países.

La consecuencia directa de esa acción política es que los gobiernos congelan las inversiones tecnológicas para mejorar sus administraciones. Proyectos de digitalización de la Justicia por ejemplo se ven afectados y se retrasan hasta superar los efectos del Niño en sus países.

El análisis del entorno se ciñe normalmente al mundo económico pero aquí tenemos una prueba que los fenómenos atmosféricos y por extensión del cambio climático son una variable más en nuestras decisiones 'tecnológicas'. Otro ejemplo interesante son las inversiones acometidas por el puerto de Hamburgo en la altura de los diques de su puerto por la previsible subida del nivel del mar.